Dejemos a Dios lo que es de Dios

Isaías 41:10-13 RVR: “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. He aquí que todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y confundidos; serán como nada y perecerán los que contienden contigo. Buscarás a los que tienen contienda contigo, y no los hallarás; serán como nada, y como cosa que no es, aquellos que te hacen la guerra. Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.”

Cuántas veces nos hemos levantado en la madrugada o no podemos dormir por las preocupaciones de nuestro entorno, no dejamos de pensar en nuestra situación económica, en la mirada que me hizo el jefe que no gustó tanto, en la ofensa que nos hicieron nuestros familiares en la última reunión; son innumerables motivos que carcomen nuestra cabeza día tras día y que no nos dejan poner foco en el mandato y promesa de Dios para su pueblo en este pasaje de Isaías 41. Tenemos que tomarnos en serio lo que nuestro Padre celestial nos promete en Su Palabra, “No temas porque yo estoy contigo”. Hay que obedecer, creer, echar fuera el temor y acoger la Palabra, Él siempre está con nosotros a nuestro lado, por oscuro que parezca el panorama Jesús siempre está ahí como nuestro amigo fiel buscando lo mejor para nosotros.

Los únicos que decidimos ser presa del temor somos nosotros mismos, Dios no nos ha diseñado para vivir en zozobra o ansiedad por todo lo que venga. Un cristiano no debe vivir en la esclavitud, un cristiano confía en la promesa de su Padre. No es un proceso sencillo, cada vez el mundo nos abre focos de nuevas preocupaciones, nuestro refugio diario debe estar en la palabra de Dios, de esta manera Él siempre acudirá, nuestra alma no morirá de sed, porque Él es la fuente de agua viva.

Entrega tus cargas diarias a quien realmente las puede llevar y resolver, no te preocupes más bien ocúpate en buscarle en todo momento y lugar.

Devocionales Refúgiate en Su Palabra, Casa de Refugio (GJ) #mimetaesanimar

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