La palabra Edén tiene su raíz en el hebrero que significa “Deleite o Placer”. Después de leer sobre el significado de la palabra Edén, creo que el deseo del Creador para con el hombre fue hacerlo feliz a través de su trabajo y te voy a decir el por qué.
Cuando Dios puso a Adán como señor del jardín del Deleite, le dio la indicación de trabajar en él, en otras palabras, lo puso de administrador, permitiéndole además vivir en él junto con su mujer. ¿Se imaginan, que nos ofrecieran vivir y además administrar un lugar bellamente diseñado, donde abunda todo lo necesario? Yo sin duda quisiera trabajar en ese lugar.
Este primer modelo de trabajo o empleo me ha hecho reflexionar un poco. ¿Será que el Señor creo el trabajo para que fuera deleitoso? No sé tú, pero yo me he visto hacia atrás en trabajos donde simplemente no era feliz, realmente no creo que fuera culpa del trabajo en sí, todo lo contrario; creo que más bien era mi propia actitud, pero más allá de mi actitud, creo que parte de mi insatisfacción provenía del perder de vista que aún mi trabajo secular, proviene del Señor y a él da honra la manera como lo realizo. Gracias al Señor en este momentos mi trabajo es un deleite, pero más deleitoso es, saber que le sirvo a Él a través de mi quehacer.
Dispongamos pues familia, nuestros corazones y nuestras manos a servir con placer, en cualquiera que sea nuestro quehacer, porque bien lo dice la palabra en Colosenses 2:23-24: “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.”
Familia, deseo que este mes sea un mes donde nos podamos deleitar en el lugar de trabajo donde el Señor nos plantó.
Devocionales Refúgiate en su Palabra Casa de Refugio, (RGG)
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