1 Pedro 5:6-7 RVR1960 “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”
Estar ansioso no trae solución a nuestras dificultades, sino que afecta nuestra salud e impide nuestro crecimiento emocional y espiritual. Cuando entramos en estas crisis de ansiedad, estamos dejando que el enemigo entre a robar el gozo de la Palabra viva y eficaz de Dios en nuestros corazones.
¿Será que somos lo suficientemente poderosos e inalcanzables para no depender y aceptar la ayuda de nuestro Padre, creyéndonos ser mejores que Él por nuestras propias obras?
Evidentemente no, porque nuestra vida, nuestra mente y nuestros planes giran alrededor del TODO PODEROSO y sus planes son perfectos para su gloria, porque sin duda alguna Él tiene el control de todas las piezas adecuadas en nuestra vida.
Cuando entregamos nuestras cargas a Dios, estamos demostrando completamente confianza en ÈL, también nos rendimos con humildad, reconociendo su grandeza y el inmenso amor que siente por nosotros.
Como hijos del PADRE CELESTIAL, somos privilegiados en poder depositar nuestra confianza en ÈL, su confianza es algo que necesitamos diariamente, ya que es nuestra mejor y única opción. Dios Es el creador de todas las cosas, Maravilloso, Omnipotente, Único, Excelso, por lo tanto, es indiscutible que no se preocupe por nosotros, como dice Su Palabra.
Filipenses 4:6 RVR1960 “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias”
Debemos dejar todas las situaciones de nuestra vida en sus manos, cuando aceptamos a JESÙS como nuestro SEÑOR Y SALVADOR, aceptamos que somos una nueva criatura en ÈL, porque esto nos lleva a reflexionar y hacer un verdadero ejercicio de FE, en donde nos hará crecer y tener una relación fluctuante con Dios y así poder descansar ¡teniendo Paz!
Su palabra contiene muchas promesas para mantener a sus hijos firmes en la Fe, por eso debemos vivir enfocados en buscar Su presencia diariamente. No seamos confiados, empecemos a darnos cuenta de lo impotentes que somos. Servimos al GRAN YO SOY, al Todopoderoso que dice Siempre te ayudaré.
Isaías 44:2 RVR1960 “Así dice Jehová, Hacedor tuyo, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará: No temas, siervo mío Jacob, y tú, Jesurún, a quien yo escogí.”
Señor, hoy vengo a Tu presencia a pedirte perdón, primeramente, porque cuando estaba ansioso (a), cometí el error de no confiar en Ti, de Dudar de tu grande amor. Te pido que por favor me ayudes a rechazar todo acto de angustia y preocupación en medio de la tribulación. Declaro por el Poder de tu Santo Espíritu que soy Libre de toda ansiedad que por décadas me había perseguido. Te amo y confieso que mi corazón es tuyo, eres mi pasión y confío plenamente en tu verdadero amor. ¡En el nombre de Jesús AMEN!
JR – Casa de Refugio
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