El Privilegio de Conocerle
Juan 14: 26-27 NTV: “Sin embargo, cuando el Padre envíe al Abogado Defensor como mi representante, es decir, al Espíritu Santo, él les enseñará todo y les recordará cada cosa que les he dicho. Les dejo un regalo: paz en la mente y en el corazón. Y la paz que yo doy es un regalo que el mundo no puede dar. Así que no se angustien ni tengan miedo”

Nuestro mayor deseo debería ser conectarnos con Dios diariamente, aprender de Jesús y conocer más profundamente al Espíritu Santo. Es Dios quien trae avivamiento, un despertar nuevo a nuestra vida cuando tenemos un corazón dispuesto, arrepentido y un espíritu con hambre y sed de Él.

Dios nos ha ungido porque tiene como propósito Usarnos, por eso es tiempo de levantarnos como Embajadores de su REINO, ser ejemplos de salvación para quienes no le conocen aún y poder ver el derramamiento de su Gloria en esta Nación. En el caminar con el Señor debemos anhelar crecer sin detenernos, perseverar en el conocimiento de Cristo que nos lleva siempre a hacer cambios profundos en la vida. En este mundo es natural no sentirse siempre en Paz, por eso Dios nos enseña en su palabra: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y pensamientos en Cristo Jesús.”(Filipenses 4: 6-7)

Tener conciencia de que soy una embajadora de su Reino me insta a liberarme de la negatividad y buscar escuchar la única Voz que importa para no dejarme intimidar por la desesperación. El Señor Todopoderoso es quien pelea por mí, Él ya libró la batalla por mi alma y venció en la Cruz del Calvario; por tanto, mi victoria ya está dada en él, necesito llenarme de la fuerza y autoridad que Él en su amor me ha dado.

Decir que conozco a Dios no se refiere solo al hecho de saber que existe, sino a TODO lo que esto involucra. El CONOCER implica una Intimidad, una relación de amistad, una verdadera consagración, entre otras cosas. Por eso, antes de decir que le conozco necesito examinarme y ver si realmente es cierto lo que afirmo. Mi determinación como su embajadora, es pasar tiempo de calidad con Él, para conocer sus planes, sus pensamientos, sus deseos para mí, para mi familia, para mi nación y para el mundo. Su voz por medio de su Santo Espíritu al escudriñar su palabra me permite ser entendida en los tiempos, ser sabia en mi andar y me ayuda a identificar y desechar de mi mente todos los pensamientos contrarios que se avecinen y los conceptos erróneos de la persona de Dios.

Hoy, Dios nos está exhortando hacia la importancia de conocerlo en intimidad y si estamos dispuestos a hacerlo, como lo hizo Jesús, por eso debemos buscarle intencionalmente, a diario estudiar las Escrituras para conectarnos con el Espíritu Santo, de tal forma que su palabra sea un deleite para nuestra alma.  

Devocionales Refúgiate en su Palabra, Casa de Refugio (JR)

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