2 Timoteo 3:16-17 TLA: “Todo lo que está escrito en la Biblia es el mensaje de Dios, y es útil para enseñar a la gente, para ayudarla y corregirla, y para mostrarle cómo debe vivir. De ese modo, los servidores de Dios estarán completamente entrenados y preparados para hacer el bien.”
Por fin llego el día, ya no tendría que rendirle más cuentas a nadie, no más horarios de oficina, no más informes ni reuniones, no más compañeros de trabajo insoportables ni problemáticas laborales, ahora sería su propio jefe, ya no tendría que pedirle permiso a nadie para tomar las vacaciones el día que quisiera, pensó. Celebró el último día de trabajo y desde el día siguiente empezó a planear cómo iniciar su propio negocio, se fue de la ciudad donde había vivido toda su vida y emprendió algo nuevo porque su deseo era tener una nueva y mejor vida.
Luego de ocuparse de cada detalle y escoger el mejor lugar, inicio su propio negocio. Era algo que realmente desconocía pero confiaba en sus capacidades y en tener las mejores máquinas para que todo funcionara a la perfección. Pasó poco tiempo y todo empezó a derrumbarse, a ir de mal en peor, nada salió como esperaba y su negocio fracasó con grandes pérdidas. ¿qué pasó? A pesar de tener la liquidez para iniciar, excelentes capacidades intelectuales y buscar las mejores alternativas, era el momento de reconocer algo muy importante y fundamental, no tenía las competencias requeridas para el negocio, todo lo que poseía no era suficiente para garantizar el triunfo de su sueño porque no estaba preparado para aquello que había emprendido, desconocía completamente esa área, por tanto sus grandes capacidades no fueron suficientes.
La biblia es considerada nuestro manual de vida, ¿te imaginas que Dios nos diera un manual incompleto? Aunque su proceso de escritura y recopilación estuvo a cargo del hombre, creo firmemente que quedó sujeto a la voluntad y soberanía del Señor, Él tenía el control de cada detalle para que no faltara ni un sola palabra de lo que quería decirle a la humanidad. Bajo este principio de fe, Pablo le escribe a Timoteo “Todo lo que está escrito en la Biblia es el mensaje de Dios”, por tanto, todo lo que está en ella nos es útil para “para mostrarnos cómo debemos vivir.”
Todos los hijos de Dios somos sus servidores o colaboradores, por eso Dios dispuso todo con el fin de prepararnos para servirle. Con nuestro Manual COMPLETO, tenemos acceso a la capacitación de Dios para la vida, “de ese modo, los servidores de Dios estarán completamente entrenados y preparados para hacer el bien.” Tenemos el libre albedrío para decidir cómo vivir, si sujetos al manual que nos capacita o como nuestra historia, que fue la realidad de alguien muy cercano, con las mejores intensiones y capacidades pero sin la preparación necesaria para sacar adelante su negocio, por tanto, su fracaso estaba anunciado.
Dos lecciones, podemos determinarnos a vivir la vida de la mejor manera posible pero si estamos por fuera de los preceptos de Dios, apartados de la familia de la fe, no vamos a tener realmente éxito porque nuestro final será pasar la eternidad sin Aquel que diseñó el manual para alcanzar la vida eterna.
Por otro lado, aunque no podamos verlo y hasta que pasa el tiempo somos conscientes de ello, Dios tiene el control y en su soberanía sujeta todo para que se haga Su voluntad, buena, agradable y perfecta, así que SUELTA EL CONTROL y ocúpate de Su palabra. Si hubiera sido la decisión del hombre crear un compendio de libros que reunieran los preceptos de Dios, todo habría fracaso, pero fue Dios, quien tuvo el control de todo el proceso para tener hoy Su palabra COMPLETA con nosotros.
“Dios bendice a quienes aman su palabra y alegres la estudian día y noche. Son como árboles sembrados junto a los arroyos: llegado el momento, dan mucho fruto y no se marchitan sus hojas. ¡Todo lo que hacen les sale bien! (Salmos 1:2-3 TLA)
2021 Año del Propósito de Dios – Casa de Refugio (KMR)
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