La Alabanza de mi Corazón
Salmo 33: 1-9 RVR1960: “Alegraos, oh justos, en Jehová; En los íntegros es hermosa la alabanza. 2. Aclamad a Jehová con arpa; Cantadle con salterio y decacordio. 3. Cantadle cántico nuevo; Hacedlo bien, tañendo con júbilo. 4. Porque recta es la palabra de Jehová, Y toda su obra es hecha con fidelidad. 5. Él ama justicia y juicio; De la misericordia de Jehová está llena la tierra. 6. Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos, Y todo el ejército de ellos por el aliento de su boca. 7. Él junta como montón las aguas del mar; Él pone en depósitos los abismos. 8. Tema a Jehová toda la tierra; Teman delante de él todos los habitantes del mundo. 9. Porque él dijo, y fue hecho; Él mandó, y existió.
 
En este pasaje, el salmista nos invita a regocijarnos en Jehová, porque por medio de la alabanza podemos conectarnos con Dios. Nos exhorta a cantar y tocar música para alabar a Dios con arpas, salterios y decacordios; sin embargo, es importante que sepamos que para alabar a Dios no tenemos que contar con una orquesta completa, lo único que necesitamos es un corazón dispuesto que quiera alabarle y exaltarle en todo tiempo. Esto quiere decir que, debemos alabar desde nuestro corazón, con sinceridad y entendiendo que reconocemos su poder y soberanía.

Cuando alabamos a Dios, independientemente de que sea en el refugio de nuestra casa o en la iglesia, debemos dejar de lado las distracciones, la pena y todo aquello que nos distraiga, sin importar qué piensen los demás, lo que realmente debe importarnos es lo que piensa Dios de nosotros. Cantar bien o mal no es algo que interfiera en la intención de nuestro corazón, puedes cantar hermoso y no estar adorando o puedes cantar como sea, pero realmente alegrando el corazón de Dios que es lo único que debe importarnos.

A través de la alabanza podemos tener la conexión que nuestro ser necesita, y allí también tener la atención de nuestro Padre, pues él ama a su creación.

La palabra de Jehová es recta y todas sus obras son hechas con fidelidad y amor. Dios ama la justicia y al justo, su misericordia llena nuestras vidas cada día, pues solo porque a él le place es que podemos respirar y levantarnos cada mañana.

Debemos temer a Jehová, pues su palabra es poderosa y su consejo perdura para siempre. Somos afortunados en conocerle y entender su soberanía pues siempre habrá bendición sobre nuestra vida si Él es quién la gobierna. Por lo tanto, nuestro corazón debe alegrarse en el Señor, y nuestra esperanza debe estar en su Santo Nombre. Debemos confiar en Él como nuestra ayuda y escudo.

Que su misericordia repose sobre nosotros, mientras esperamos en Él con renovada confianza y fe. En resumen, el Salmo 33 nos llama a alabar a Dios con alegría y a depositar nuestra confianza en Él, reconociendo su poder y misericordia en nuestras vidas.

Devocionales Refúgiate en Su Palabra, Casa de Refugio (MM)
#MimetaEsAlabar

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